Sepa cómo promover el buen funcionamiento del sistema linfático con remedios naturales ¿Qué es el sistema linfático?
El sistema linfático comprende las glándulas, los ganglios linfáticos, el bazo, las amígdalas, el timo, los capilares y vasos linfáticos. Su buen funcionamiento es crítico en la producción de glóbulos blancos, en la defensa inmunitaria de nuestro organismo y en su depuración de residuos y exceso de líquidos. Gracias al sistema linfático, los residuos líquidos presentes en las células, son transportados al hígado y los riñones, de manera que puedan ser filtrados a través de estos órganos.
Todo el sistema linfático trabaja para permitir que nuestro cuerpo se deshaga de las toxinas y productos de desecho, que se originan en los procesos que tienen lugar en el propio organismo; así como en la toma de medicamentos y drogas; el humo del cigarrillo y los contaminantes presentes en el aire; los residuos de plaguicidas y aditivos alimentarios en los alimentos, por mencionar sólo algunos de los principales ejemplos.
Un sistema linfático que no funciona correctamente puede provocar la aparición de hinchazón en los pies y tobillos, celulitis, exceso de peso, dolores de cabeza, artritis y bursitis. Algunas enfermedades pueden ser causadas por la necesidad de mantener una posición estática durante un largo tiempo, de pie o sentado. Un primer sistema de filtrado de toxinas se produce a nivel de los ganglios linfáticos. La purificación de la linfa tiene lugar a través de órganos específicos, representado por el timo, el bazo y la médula ósea. ¿Cómo promover el buen funcionamiento del sistema linfático? Estos son algunos consejos para mejorar el sistema linfático.
1) Respiración profunda
En nuestro organismo la linfa circula en una cantidad tres veces mayor a la de la sangre, pero mientras que la sangre es bombeada desde el corazón, no hay un órgano de soporte para el paso de la linfa a través de los capilares y vasos linfáticos. Este paso se ve favorecido por el movimiento muscular y la respiración. La respiración profunda desempeña una verdadera acción de bombeo de la linfa, para ayudar a transortar las toxinas a la sangre y luego al hígado. Por esta razón, la respiración profunda ayuda a deshacerse de las toxinas.
2) Realizar ejercicio
Hacer un poco de ejercicio y realizar una actividad física regular, asegura que el sistema linfático funcione correctamente. Entre los ejercicios más recomendados están el estiramiento y la actividad aeróbica. Incluso rebotar y saltar sobre una pequeña cama elástica puede ser muy útil.
3) Agua y limón
Sin un suministro adecuado de agua, el líquido linfático no puede fluir correctamente. Para asegurarse que el agua puede ser absorbida inmediatamente por las células, es aconsejable mezclarle un poco de zumo de limón. El agua se debe elegir como bebida principal, eliminando refrescos, bebidas energéticas y jugos de fruta envasados, con alto contenido de azúcar, colorantes y conservantes que contribuyen sobrecargar el sistema linfático.
4) Fruta fresca con el estómago vacío
Las enzimas y ácidos que se encuentran en las frutas, se consideran poderosos purificadores de la linfa. Para una mejor digestión se recomienda comer la fruta con el estómago vacío. La mayoría de las frutas se digieren en 30 minutos y, por tanto, representan una rápida ayuda para sentirse mejor inmediatamente.
5) Verduras en abundancia
Junto con las frutas, las verduras son importante para aportar a nuestro organismo niveles adecuados de la clorofila, que ayudan a purificar la sangre y la linfa. Por esta razón, es importante incluir en las comidas vegetales de hojas verdes como la espinaca, rúcula, col y lechuga.
6) Nueces y semillas
Una vez más, la promoción de un buen funcionamiento del sistema linfático se produce a través de la alimentación. Es importante desde este punto de vista, incorporar ácidos grasos esenciales a través del consumo de frutos secos y semillas oleaginosas: nueces, almendras, avellanas, nueces de Brasil, semillas de lino, semillas de girasol y semillas de calabaza.
7) Tisanas
Hay algunas tisanas que pueden ayudar a mejorar el funcionamiento del sistema linfático. Entre las hierbas recomendadas incluyen, por ejemplo, la equinácea , el sello de oro y el astrágalo. No olvide de consultar a su médico y también al herbolario, para conocer las combinaciones de hierbas que mejor se adapten a su caso.
8) Cepillo para masajes
Antes de la ducha se puede utilizar un cepillo de cerdas naturales para pasar sobre la piel seca con un movimiento circular, comenzando desde los pies hacia el pecho y desde los dedos de ambas manos hacia el pecho. Es necesario realizar el masaje en la misma dirección que corre la linfa, es decir, hacia el corazón.
9) Alternar duchas calientes y frías
Durante la ducha es aconsejable alternar chorros de agua fría y caliente durante varios minutos. El calor dilata los vasos sanguíneos y el frío hace que se contraigan. Esta sugerencia no se recomienda en caso de problemas de presión arterial o embarazo.
10) Masaje de drenaje linfático
El masaje de drenaje linfático es un tipo particular de masaje que permite mejorar el flujo de la linfa en el organismo y ayuda a deshacerse de las toxinas. Cada tipo de masaje debe hacerse de manera delicada, ya que una presión excesiva no permite estimular el sistema linfático,a diferencia de lo que sucede en el caso de los masaje musculares.