La medicina china llega en auxilio de nuestro organismo para depurarlo en el cambo de estación. Ya ha llegado la primavera y según la medicina tradicional china, esta estación está vinculada energéticamente con el movimiento de la Madera, donde el elemento yin del hígado y el yang de la vesícula biliar, están en primer plano.
La primavera es un despertar, un renacimiento, una explosión de energía que comienza a partir del metabolismo hepático: el hígado pone todo en marcha y moviliza en todas las direcciones; armoniza la cirulación de la energía de la sangre y los líquidos, favorece la digestión y la asimilación de nutrientes; drena, difunde y dispersa, y finalmente conserva la sangre y controla los tendones.
Para llevar a cabo estas funciones y no ser aplastados por el Qi (flujo vital de energía) , esta energía bulliciosa, debe ser apoyada y asistida por la desintoxicación y depuración del organismo.
Ayudemos al sistema hepático a enfrentar un trabajo regenerador importante, con algunos remedios naturales como el diente de león, el cardo mariano y las bayas de Goji.
Salimos del invierno, de una alimentación energética y proteica, de un metabolismo aletargado y conservador, de un adormecimiento general del organismo. Estos son 3 remedios naturales que intervienen sobre el sistema hepático y ayudan al hígado a depurarse.
Diente de león
El diente de león también llamado achicoria amarga, florece en abril y mayo en los prados, salpicándolos de un color amarillo intenso. Es una planta solar en el sentido de que está energéticamente conectada con el sol
La característica de las plantas solares es que son de apariencia real, a menudo con flores circulares y de color amarillo-oro. Actúan sobre el humor, el corazón y la circulación sanguínea, los ojos y la vitalidad celular. Se consideran plantas curativas.
El diente de león cumple plenamente con esta descripción, de hecho toda la planta se considera medicinal y desarrolla importantes acciones para la vesícula biliar y el hígado. Tiene propiedades depurativas y coleréticas: estimulan la producción de bilis con la capacidad de emulsionar las grasas y dirigirlas al intestino, además de propiedades estomacales, tónicas y diuréticas.
Se puede administrar en forma de:
Tintura: 30 gotas, 3 veces al día antes de las comidas
Decocción: 5-15 gr. en 200 ml de agua. Una taza 2-3 veces al día antes de las comidas.
Cardo Mariano
Es una planta que puede alcanzar hasta 2 metros de altura, que tiene una estructura dura y espinosa y una flor morada. Tiene efectos antioxidantes y protectores.
Estas características la ubican entre las plantas de la marciales, cuya energía está dirigida por Marte: son plantas de aspecto rudo, las hojas tienen forma de lanza, su olor puede ser picante y con frecuencia se manifiestan con colores tendientes al rojo.
El cardo energéticamente tonifica el Qi del hígado y la vesícula, facilitando el flujo. Combaten la insuficiencia y la degeneración hepática que pueden causar náuseas, dolores de cabeza y estreñimiento, promoviendo la regeneración de los hepatocitos (células que constituyen el hígado).
Mueve también el estancamiento de la sangre del hígado, que se manifiesta por palidez, mareos, uñas quebradizas y falta de sueño.
Se puede administrar en forma de:
Extracto seco: 200-400 mg 2 veces al día
Decocción: 10 gr. en 200 ml. de agua, a tomar después de las comidas
Tintura: 30 gotas, 3 veces al día
Licio, Lycium barbarum
Probablemente este nombre no dice mucho a la mayoría de la gente y durante mucho tiempo fue conocida sólo con su nombre botánico. Desde hace algún tiempo, sin embargo, este remedio natural está en boga gracias a sus potentes propiedades antioxidantes, con el nombre de «bayas de Goji«.
Esta planta se caracteriza por sus bayas rojas de sabor similar a las frambuesa y arándanos. Energéticamente tonifican el yin y la sangre del hígado, estabilizando la energía, el Qi. El Lycium barbarum, de hecho, juega acción adaptogénica gracias a la arginina y la glutamina, dos aminoácidos que tonifican los músculos, el humor, la memoria, la concentración y el sueño, tras las cuales se esconde el hígado, gran director de estas funcionalidades.
La acción antioxidante está dada por los flavonoides que ayudan a reducir el colesterol, y regularizar los niveles de azúcar en la sangre.
Se puede ingerir en forma de:
Zumo de Goji: 20 ml por la mañana con el estómago vacío
Extracto seco: se consigue en cápsulas y la dosis depende del peso relativo
Bayas secas: se pueden añadir al yogur