De acuerdo con una reciente investigación, la sustancia contenida en la menta favorecería un cambio en la formación de la grasa corporal estimulando el proceso de adelgazamiento. Una ayuda natural para adelgazar provendría de mentol. Específicamente, el proceso desencadenado por el mentol cambiaría el tejido adiposo blanco, un depósito natural del cuerpo humano que satisface las necesidades energéticas del organismo, con características similares a las del tejido adiposo marrón, cuya respuesta se activa en relación con situaciones de hipotermia. Esta condición ocurre cuando la temperatura corporal cae por debajo del umbral mínimo de 35 grados.
Cuando la temperatura del cuerpo desciende por debajo de los niveles normales, este segundo tipo de grasa se quema para proporcionar al organismo el calor necesario.
Una de las moléculas capaces de inducir esta transformación se encuentra en el mentol, conocido por todos por su capacidad para evocar una sensación de frío, en contacto con la piel y las membranas mucosas. Esta sustancia vegetal, conocida desde hace miles de años, estimula las células del tejido adiposo blanco para que consuman grasa, produciendo calor.
El mentol se utiliza ampliamente en las industrias alimentarias, cosméticas y farmacéuticas y carecería de efectos adversos en los seres humanos, por lo tanto es una posible nueva estrategia para el tratamiento de la obesidad.
Los resultados de estas investigaciones se vinculan con una hipótesis planteada por investigadores holandeses del Centro Médico de la Universidad de Maastricht, según la cual, manteniendo los ambientes de la casa a una temperatura de alrededor de 17° C, es posible acelerar el proceso de pérdida de peso mediante la inducción de hipotermia.