La piña es una fruta que procede de América y de la que se conocen sus propiedades curativas desde hace varios siglos, gracias a su elevado contenido en vitamina C y a una enzima conocida como bromelina.
Propiedades de la piña
Además de ser conocida mundialmente para ayudar en los procesos de adelgazamiento, la piña también tiene propiedades curativas que ayudan a mejorar las funciones de la circulación y digestivas, a disminuir la presión arterial, a relajar los músculos, frenando los espasmos musculares y a ayudar en la diabetes, en la artritis y en los problemas de corazón.
La piña dentro del mundo de la belleza
En este caso nos vamos a centrar en las cualidades que ofrece la piña dentro del campo de la belleza, cualidades que se han descubierto recientemente y que proporcionan una mejor textura de la piel, contribuyen a suavizar las cutículas y por supuesto a perder kilos, por lo que su introducción en dietas como la de Atkin entre otras, no debe faltar.
Usos externos de la piña
La piña resulta una excelente exfoliante para todo el cuerpo, especialmente si se mezcla con la papaya. Con esta preparación se eliminarán las células muertas de la piel y se podrá revelar una piel mucho más saludable y joven.
Los ingredientes que se van a necesitar para fabricar en casa este exfoliante serán una rodaja gruesa de papaya, una rodaja también gruesa de piña y una cuchara de miel de abejas.
Con la rodaja de piña lavada y pelada, se extrae su pulpa y se hace un puré hasta conseguir tres cucharas. Se mezcla con la miel de abeja de con la papaya hasta que se consiga una papilla.
Con la piel mojada tras salir de la ducha, se aplica esta mascarilla siempre con movimientos circulares sobre todo el cuerpo y se deja actuar durante unos cinco minutos. Se lava la piel posteriormente con abundante agua templada y se procede a ducharse de nuevo de manera habitual. Al finalizar se estimula la circulación de la sangre con chorros de agua fría.
En el caso de buscar un producto que ayuda a suavizar las cutículas de los dedos, se deben mezclar dos cucharas de zumo de piña junto con una yema de huevo y cinco gotas de zumo de limón. Se mezclan bien todos estos ingredientes y después se sumergen en esta mezcla las uñas durante unos diez minutos. Transcurrido este tiempo se empujan suavemente las cutículas hacia atrás.
También se puede preparar una mascarilla casera con manzanilla y piña, ideal para las pieles grasas que tienen espinillas y barros.
En este caso se necesitará una rodaja de piña, medio vaso de toronja fresca y un puñado de perejil. Este remedio se utilizará de una manera interna y para ello se deben licuar todos los ingredientes y colarlos. El resultado se toma una vez a la semana siempre en ayunas y de manera alterna, es decir, un día sí y uno no. Transcurrida la semana, se debe descansar otra e iniciar de nuevo durante una semana más. Este jugo no está recomendado para personas que tienen úlceras o padecen gastritis.