Recientes estudios han demostrado que, además de ser un poderoso antioxidante, el café verde es un aliado en la lucha contra la diabetes. El extracto de café, hecho de granos de café verde no tostado, puede ayudar a reducir e incluso controlar los niveles de azúcar en la sangre. Una importante novedad, beneficiosa también para combatir la diabetes tipo 2, que fue presentada en la 245th National Meeting & Exposition of the American Chemical Society (ACS), por investigadores de la Universidad de Scranton, Pennsylvania.
Ya conocido como potente antioxidante, en un estudio realizado por el profesor Joe Vinson, el extracto demostró ser útil también para regular los niveles de azúcar en la sangre y mejorar las funciones corporales; el estudio reveló que dosis altas de extracto, podrían combatir con eficacia la diabetes tipo 2.
La investigación se llevó a cabo con píldoras que actualmente se encuentran en el mercado, y que, junto con una dieta saludable, de acuerdo a los resultados del estudio, pueden ayudar a disminuir el avance de la enfermedad.
«Es una píldora simple y natural que, por un lado, ayuda a bajar el azúcar en la sangre y promover la pérdida de peso; por otro, es un importante paso adelante en el tratamiento de la diabetes tipo 2. Nuestra investigación y estudios publicados por otros científicos sugieren que este tipo de tratamiento es posible. Existen datos epidemiológicos significativos que muestran que el consumo de café reduce el riesgo de diabetes tipo 2«, explicó el investigador .
El Dr. Vinson y sus colegas estudiaron a 30 hombres y mujeres de peso normal que no tenían ningún tipo de diabetes. Los participantes recibieron dosis de extracto de café verde de 100 mg a 400 mg al día. A continuación, se realizron pruebas de tolerancia a la glucosa en diferentes etapas del estudio.
Al final, el equipo descubrió que el extracto de café verde había tenido éxito en la reducción de los niveles de azúcar en la sangre de cada participante. Y que en los que recibieron la dosis más alta, de 400 mg, la caída fue aún más significativa.
Todo esto es mérito del ácido clorogénico, una sustancia que, naturalmente, se encuentra no sólo en los granos de café verde (en grandes cantidades), sino también en el té verde, o en frutas como manzanas, duraznos, aguacates , cerezas y ciruelas.