Existen soluciones naturales muy eficaces para contrarrestar la debilidad de los capilares, entre ellos, el extracto de hojas de vid roja y la centella asiática. Los capilares son vasos muy permeables y extremadamente delgados que están situados entre el extremo de salida de una arteria y el extremo inicial una vena. Forman una compleja red que permite el intercambio de nutrientes y oxígeno entre la sangre y los tejidos. Cuando se endurecen y pierden elasticidad, los tejidos están menos oxigenados y las venas pueden notarse en la superficie de la piel, principalmente en el rostro (rosácea), las piernas, e incluso a nivel de los ojos. Es justamente la mala oxigenación, una de las causas de la fragilidad de los capilares que se pone de relieve, por ejemplo, con el enrojecimiento de la dermis (la mencionada rosácea).
Factores que favorecen la fragilidad capilar
– Herencia, o si ya existen en los casos familiares de fragilidad capilar.
– Asunción de fármacos anticoagulantes.
– Deficiencia de vitaminas A y C.
– Uso de prendas muy ajustadas y calzados de tacones altos o ajustados.
– Baños o duchas calientes, ya que el calor juega un papel crucial en este problema.
Remedios naturales para las piernas hinchadas
La vid roja tonifica las venas
La planta de Vitis vinifera, contiene altas dosis de antocianinas que ayudan a reducir el edema y tonificar las venas. Los ensayos clínicos han demostrado su eficacia contra la rosácea, fragilidad capilar y las piernas hinchadas.
Si tiene la posibilidad, recoja unas cincuenta hojas de vid roja, tritúrelas, y póngalas en una bolsita de gasa. Llene la bañera con agua caliente (no hirviendo) y sumerja la bolsita (o colóquela bajo el grifo para que el agua pase por ella). Realizar un baño de inmersión de 15 minutos, secarse y masajear la piel con aceite de Argán (añade vitaminas y elasticidad).
También es excelente como suplemento; el extracto de hojas de vid roja es muy útil para la oxigenación de las paredes de los vasos sanguíneos y el microflujo: Tome una tableta al día durante el desayuno (especialmente durante los meses de verano).
Centella asiática contra las varices
La centella asiática es una planta utilizada durante siglos por la medicina ayurvédica para la prevención y el tratamiento de las venas varicosas. Se añade a los geles y cremas específicos para problemas de piernas hinchadas.
Además de un tratamiento cosmético (entre otros beneficios, también reduce las estrías), la centella asiática se puede incorporar en forma de tintura madre. Tomar 2-3 veces al día durante unos 2 meses, 20 gotas de tintura de Centella asiática diluida en agua natural, para aliviar el problema de las várices.