Cuando hay alguna obstrucción que impide el correcto paso del aire por la nariz se producen los ronquidos, sonido que puede llegar a resultar muy molesto no tanto para quien lo sufre en su propia carne, como para quien está a su lado.
Esos desagradables ronquidos
Casi un 25% de la población mundial ronca cuando está durmiendo, algo que puede entorpecer el descanso. Además son cada vez son más jóvenes las personas que lo hacen y aunque no está considerado como una enfermedad, la verdad que roncar es síntoma de que algo no funciona como debiera.
Entre las causas más comunes de los ronquidos cabe mencionar el consumo de alcohol, fumar, congestión nasal ya sea por alergias o por resfriado, un agrandamiento de las amígdalas, sobrepeso, lengua gruesa, cuello corto e incluso hay muchas mujeres que durante su último mes de embarazo comienzan a roncar, aunque nunca antes lo hayan hecho, por la tendencia a acumular líquidos que puede incluso llegar a congestionar las mucosas nasales. Otra razón puede ser por ciertas deformaciones en la nariz o por tener el tabique desviado
Remedios naturales para eliminar y reducir los ronquidos
Uno de los remedios naturales más conocidos y más utilizados entre otras cosas por su sencillez, es partir por la mitad una cebolla y echar un poco de sal sobre ella. Después se coloca en un plato pequeño sobre la mesilla de la habitación, lo más cerca posible a la cabecera de la cama mientras se duerme.
Otra opción es preparar una solución salina que se puede conseguir mezclando un vaso de agua con media cucharada pequeña de sal, junto con un poco de bicarbonato de sodio a temperatura ambiente. Después se aplica un chorro de esta mezcla en la nariz para ayudar a destaparla, con lo que se evitará abrir la boca y por consiguiente la tendencia a roncar.
También se puede mezclar un vaso con un poco de aceite de oliva y cincuenta gramos de ruda para dejarlo reposar en un recipiente hermético durante dos semanas. Transcurrido este tiempo se debe colar la mezcla y guardar dentro de un recipiente que sea oscuro para aplicar cada noche, antes de dormir en las aletas de la nariz, en el cuello y en la nuca.
Consejos y recomendaciones
Se deben evitar los tranquilizantes y las bebidas alcohólicas ya que estos dos elementos pueden llegar a causar depresión en el sistema nervioso central además de relajar los músculos del diafragma y de la mandíbula, algo que aumenta bastante las probabilidades de que una persona ronque mientras duerme.
Se recomienda también dormir de lado, ya que algunos estudios han podido demostrar que cuando se duerme boca arriba se ronca más. Para evitar ponerse de esta postura una vez se está dormido, se pueden tomar algunas medidas extras como por ejemplo colocar pelotas de tenis en la cama de tal manera que si se acuesta en esa posición la persona se sienta incómoda y se coloque de lado nuevamente. También se puede subir la cabecera de la cama aproximadamente diez centímetros.