Malestar estomacal, somnolencia, inflamación del estómago, los remedios naturales también pueden ayudarnos con estos problemas. 
La digestión difícil, en términos médicos, se llama dispepsia. Pueden ser de naturaleza orgánica como la gastritis aguda y crónica, (que es una inflamación de la mucosa gástrica) o funcional (úlcera gástrica, la cual es una erosión de la mucosa gástrica o en casos más severos una perforación de la pared del estómago).
Síntomas
Se trata de una alteración de la función digestiva gástrica o intestinal, caracterizado por una pesadez de estómago, somnolencia o dolor de cabeza después de las comidas. A veces se tiene dolor crónico o molestia en la parte superior del abdomen, aerofagia, flatulencias, pirosis gástrica (ardor, acidez estomacal), distensión abdominal, náuseas y vómitos.
Diagnóstico
El diagnóstico de una mala digestión requiere una investigación preliminar de factores tales como el uso de medicamentos (drogas anti-inflamatorias no esteroides o AINE como aspirina, hierro, teofilina, etc.), Helicobacter pylori, úlcera gástrica (estómago), gastritis (inflamación del revestimiento interno estómago), mala alimentación (dieta), obesidad, o enfermedad por reflujo gastroesofágico
Alimentación en caso de mala digestión
La digestión lenta puede involucrar el estómago o el páncreas.
Cuando la digestión resulta particularmente difícil con alimentos ricos en proteínas como carne y productos lácteos, significa que el estómago no produce suficiente jugos gástricos para la digestión. Puede ser útil en este caso la suplementación con vitaminas del complejo B para reactivar su producción, que se obtiene de alimentos ricos en este complejo vitamínico como cereales integrales, legumbres, huevos, verduras, nueces y avellanas.
Si en en cambio la digestión se manifiesta con somnolencia y pesadez en el estómago después de la comida, lo más probable es que se deba a la falta de producción de enzimas digestivas del páncreas.
En ambos casos, es posible ayudar la función digestiva observando algunas precauciones:
– Evite los alimentos hervidos o cocinados con métodos de cocción excesivamente prolongados y acuosos (por ejemplo, sopas o guiados);
– Comience la comida con verduras crudas: hinojo, zanahoria, apio, pepinos;
– Acompañe la comida con un zumo de naranjas recién exprimido;
– Sazone la carne o el pescado con jugo de limón, o con una mezcla de aceite de oliva virgen extra, sal, romero, perejil, ajo y vinagre, que se dejarán evaporar al final de la cocción;
– Prefiera cocinar los alimentos grillados o en sartén, con poco aceite.
Remedios naturales y plantas medicinales para la digestión difícil
Entre las hierbas que ayudan para contrarrestar la mala digestión están:
Regaliz: (Glycyrrhiza glabra): su raíz posee propiedades digestivas, antiinflamatorias y protectoras de las membranas mucosas;
Anís (Pimpinella anisum) sus semillas, como las del hinojo (Foeniculum vulgare), comino (Cuminum cyminum) y cilantro (Coriandrum sativum), se utilizan tradicionalmente para facilitar la función digestiva, sobre todo en después de comidas abundantes y altas en grasas. La acción carminativa depende tanto de la capacidad para inhibir los procesos de fermentación en el intestino grueso, como por su acción antiespasmódica sobre el músculo liso del colon. Durante la fermentación intestinal, en particular la de los azúcares, se producen grandes cantidades de gas, que son inflaman el intestino y estimulan las contracciones de la musculatura lisa, causando hinchazón, flatulencia y dolor abdominal;
Genciana: (Gentiana lutea) su raíz se utiliza en diferentes formulaciones que favorece la digestión, ya que aumenta la motilidad y la secreción gástrica, actuando en la estimulación refleja de las papilas gustativas, y no en las células de la mucosa del estómago. Por esta razón, la acción digestiva de esta planta no es irritante. La genciana también se utiliza en el tratamiento de la anorexia, la atonía gástrica o digestiones largas y pesadas, debidas a una secreción gástrica insuficiente.
