Desde siempre considerado un producto anti-envejecimiento, la mantequilla de karité cuida la piel gracias a sus numerosas propiedades. Es real, la mantequilla de karité es un producto natural maravilloso. Es lo que se necesita para mantener la piel siempre joven y evitar que se deshidrate debido al stress de cada día. Esta pomada, crema, aceite o cualquiera sea su presentación, es un verdadero aliado de la belleza.
La mantequilla de karité es un producto 100 % natural y muy completo: tiene propiedades hidratantes, protetoras, otorga elasticidad, suaviza, es calmante, cicatrizante y antioxidante.
El árbol de karité crece en las sabanas arbóreas del oeste de África. Su fruto contiene en su interior una semilla leñosa. De la trituración de estas semillas se obtiene la mantequilla de karité.
La maravillosa mantequilla de karité se utiliza como cosmético y como fármaco, desde hace siglos en África, los nativos lo llaman «árbol de la juventud» y lo utilizan para realizar masajes contra el reumatismo, en quemaduras, quemaduras solares, irritaciones de la piel, etc .
En los últimos tiempos el uso de la mantequilla de karité se ha vuelto muy popular en cosmetología y sus propiedades protectoras, calmantes, curativas e hidratantes han sido probadas científicamente.
Sus propiedades son útiles también en el caso de dolores reumáticos, musculares y la artritis; para reducir las estrías durante el embarazo y en el cuidado del bebé.
La mantequilla de karité se utiliza en los siguientes casos :
– piel madura (la mantequilla de karité tensa la piel);
– piel muy seca;
– manos afectadas por el trabajo, por ejemplo, que están en contacto con productos químicos, jabones, etc. o pieles que se descaman:
– las estrías del embarazo- como pre y post solar
– dermatitis del pañal en bebés
– mezcláda con un aceite base para masajes
Perfumes y duración:
La mantequilla de karité pura se conserva bien durante al menos 3 años. Su perfume se puede variar a gusto, añadiendo aceite de jojoba y aceites esenciales a elección. El aceite de jojoba y los aceites esenciales son ideales para adicionar (aprox. 20 % de aceite de jojoba) sin disminuir su vida útil y aumentando la suavidad de su textura.