Durante todo el año, pero principalmente en el período de verano, cuando hay más contacto con el agua y el clima favorece el desarrollo de gérmenes, grandes y niños pueden verse afectados por esta enfermedad. La otitis externa es una dolencia que se presenta con dolor de oído, a menudo acompañada de picazón y secreciones. La infección generalmente es causada por bacterias u hongos y suele tener en su origen una historia de trauma o exposición al agua.
Si se toca la oreja o se la mueve, se produce dolor, que también puede darse aún sin estimulación. Ante el exámen médico, el canal auditivo (oído) aparece edematoso (hinchada) y se pueden ver secreciones purulentas y el tímpano puede aparecer enrojecido.
La medicina tradicional recomienda la aplicación tópica de antibióticos y corticosteroides, estos últimos sólo si se excluye una infección por hongos. Los analgésicos en gotas se utilizan para aliviar el dolor.
Es recomendable evitar la humedad, manteniendo la zona bien seca. La curación se produce en pocos días pero, algunas formas complicadas, pueden evoljucionar hacia una otitis crónica o recidivante. En cualquiera de los casos, siempre es aconsejable consultar al médico con prontitud.
Remedios naturales para la otitis
Existen también algunos remedios naturales a los que recurrir.
En los casos de otitis externa, la acción expectorante y antiinflamatoria del aceite esencial de apio de monte o levístico ayuda a aliviar los síntomas; aplicacr todos los días, por la mañana y por la noche en el oído afectado.
Muy útil también es la cebolla: su generoso contenido de sulfuro de Allide, la sustancia que hace lagrimear los ojos, proporciona un efecto mucolítico efectivo y anti-inflamatorio. simplemente aplicarla en forma de compresas, por la mañana y la noche, sobre el oído afectado.
Si la infección afecta el oído medio, es mejor elegir el ajo, un óptimo antibiótico natura, con excelentes propiedades antisépticas y desinfectantes; o la manzanilla, conocida por su capacidad inflamatoria y calmante. La exposición de los oídos, dos veces al día a una fuente de vapor con extracto de manzanilla, o con sus flores, ayuda a aflojar la flema y el moco, cuyo estancamiento en el oído provoca esta enfermedad o empeora los síntomas dolorosos.
Muy útil es también otra planta sedante y expectorante: la lobelia. 3 gotas de extracto líquido en la oreja afectada por la otitis, pueden ser una verdadera bendición