Los hematomas, nombre médico que reciben los moratones, aparecen cuando alguien se golpea y se produce una rotura en los vasos sanguíneos más pequeños de la piel o capilares. Dichos vasos sanguíneos se van regando con el tejido de alrededor y según los glóbulos rojos se van reuniendo, se va apreciando un cambio de color en la región dañada.
Arnica
Los moratones comienzan como una lesión de un color rojo púrpura y se van volviendo de color verde o amarillento según el cuerpo va trabajando para sanar la zona, metabolizando la masa de los glóbulos rojos que logró escaparse en el momento del golpe.
Uno de los remedios más populares para lograr reducir los hematomas es la árnica. Esta planta contiene numerosas propiedades entre las que sobresale la de ser analgésica, antiinflamatoria y antiséptica. Los flavonoides que contiene la árnica ayudan a disminuir la permeabilidad propia de los vasos sanguíneos, por lo que resulta increíblemente buena para tratar este problema. En cualquier caso nunca se debe ingerir para tratar este problema y solo debe usarse de una manera externa. Se vende en las farmacias en forma de crema por lo que es muy sencilla de conseguir.
La consuelda
Uno de los remedios más antiguos para tratar los problemas de la piel es la consuelda. Esta hierba cuenta con la alantoína, un producto químico que ayuda a promover la reparación de la piel externa del cuerpo. Para utilizarla, siempre externamente, se debe preparar una infusión con esta planta y después proceder a aplicar en la zona golpeada para evitar que aparezca el conocido moratón.
El perejil
Otro remedio casero para evitar la aparición de un moratón en la piel, es aplicar sobre el golpe en cuestión, unas hojas de perejil bien machacadas durante varias veces cada día hasta que desaparezca completamente, algo que suele suceder en un par de días aproximadamente.
La patata
También es muy efectivo colocar unas rodajas de patatas crudas sobre la zona amoratada y dejarla actuar durante unos minutos. De esta manera se evitará la inflamación y por consiguiente los vasos sanguíneos podrán volver a funcionar correctamente mucho antes.
El agua de hamamelis
El agua de hamamelis o conocida popularmente como “agua maravilla” es un astringente bastante popular para estos casos que ayuda también a reducir los moratones en la piel, aplicándolo sobre la zona afectada durante varias jornadas hasta conseguir que desaparezcan.
La cebolla
Un remedio muy natural y que igualmente se puede realizar en casa, es la cebolla. Parece ser que el químico causante de que los ojos lloren cuando se está picando, sirve también para estimular el flujo linfático para ayudar que la sangre no se llegue a acumular en la zona dañada y por consiguiente que se forme el moratón o hematoma. Para ello tan solo es necesario aplicar una rodaja cruda de cebolla en la zona donde se ha producido el golpe lo más rápidamente posible tras éste, y dejarla que actúe durante unos minutos. Se puede repetir la acción varias veces al día.