A este fruto se le puede sacar mucho provecho tanto dentro del hogar como en la higiene personal. Existen muchos remedios y trucos que pueden realizarse gracias al uso de este cítrico cuyos ácidos proporcionar unas excelentes propiedades antisépticas que ayudan a eliminar las bacterias y los gérmenes. 
Limpieza del hogar
Si en tu hogar tienes mármol blanco, utiliza un poco de zumo de limón para aplicarlo sobre la superficie elegida con la ayuda de una esponja. Deja que actúe durante toda una noche y a la mañana siguiente enjuaga con abundante agua para terminar secando con un trapo que sea de algodón.
También es perfecto para limpiar los quemadores de tu cocina. Diluye el zumo de un limón en agua caliente. Espera unos minutos y con un trapo frota los quemadores hasta que veas que la grasa se va desprendiendo.
Puedes quitar las manchas de óxido de la ropa, echando unas gotas de zumo de limón directamente sobre la zona sin que se extienda al resto de la prenda puesto que podría desteñirla. Deja unos minutos que el limón sea bien absorbido y después lava con agua y con jabón.
Para limpiar perfectamente tu microondas corta un limón en dos mitades y exprime su jugo dentro de una taza con agua. Después empapa un trapo con dicho líquido y limpia con él el interior del microondas que además de quedarte completamente limpio, despedirá un fragante olor.
El zumo de limón cuenta con un potente efecto blanqueador por lo que lo puedes utilizar para lavar tus prendas blancas y que éstas recuperen todo su brillo. Para ello introduce media taza de zumo de limón en el ciclo del aclarado.
Higiene personal y limón
Cuando tengas los pies cansados puedes prepararte un baño con limón para éstos. En un recipiente lo suficientemente ancho como para que puedas colocar con facilidad los pies, introduce medio litro de agua y un limón partido en dos. Frota con una de las mitades los tobillos y los pies y déjalos que reposen dentro del líquido unos diez minutos aproximadamente.
Puedes utilizar también el limón para quitar las manchas de nicotina que se manifiestan en los labios, las uñas o los dientes. Para ello frota bien la zona elegida con un algodón perfectamente impregnado en zumo de limón.
Para aclarar el color del cabello, puede añadirse al agua del aclarado el zumo de limón y rápidamente empezarás a comprobar los resultados. También puede utilizarse para aclarar el vello del rostro, de las piernas o de los brazos si no se quiere recurrir a la depilación. En este último caso se debe pasar un algodón empapado en limón por la zona a tratar dos veces al día.
Si padeces de acné, aplica una o dos gotas de limón antes de irte a dormir justo en la zona del grano o granos en concreto y a la mañana siguiente lava bien con agua. Es fundamental aplicar por la noche, ya que si se hace durante el día, los rayos del sol pueden conseguir que el limón provoque manchas en la piel.
